19 de agosto 2020: Costa da Morte

 

Tras un sueño reparador y un estupendo desayuno nos vamos a seguir nuestro periplo por Costa da Morte. 

Paramos en el mirador del faro de Punta Nariga, donde nos acopaña un viento intenso, pero al menos no llueve. 

 Nos encanta de Galicia! lo entretenido que es todo, no te aburres un instante viajando por sus interminables y recónditas carreteras que siempre te llevan a sitios fascinantes. Es una región mágica con muchísimos encantos.

Necesitamos recargar agua, así que gracias a Park4night, llegamos a un punto de limpieza y carga de agua que ofrece el amable pueblo de Cosme Aldea. La verdad que es muy de agradecer esta muestra de generosidad por parte de este pueblo.

Una vez todo limpio y cargado, nos vamos en dirección a Camariñas para ver si nos comemos ahí un buen pescado o marisco. Llegamos muy tarde y todos los restaurantes de tripadvisor se encuentran ya llenos, así que nos la jugamos con uno que tiene buena pinta. Restaurante ARiño. Nos comemos un buen pulpo, mejillones y rodaballo. Sobre todo el rodaballo, excelente! Según mi humilde entender, parecía salvaje por la dureza de su carne, pero no lo sería, porque luego vimos pegada al faro de Camariñas una enorme piscifactoría que es famosa por sus lenguados y rodaballos...

El tiempo después de comer se vuelve furibundo, una intensa lluvia acompañada de un fuerte viento no nos deja abandonar la furgo en ningún momento...  El pueblo de Camariñas lo visitamos desde el vehículo, pero por lo poco que vemos, bien merece un largo paseo... las casas de los pescadores, la avenida de los hórreos, el faro... muy bonito todo, pero este clima inhóspito nos impide disfrutarlo como es debido. De todos modos, estamos en Cosa Da Morte, famosa por sus vientos y ventiscas... ¿qué podíamos esperar?? Esto también le confiere su encanto...

No sabemos si cambiar el recorrido o seguir con lo previsto, pero Gemma me convence para seguir adelante. Así que nos vamos a Muxía, próximo destino en Costa da Morte. Allí el vendaval sigue con una fuerza endiablada, así que seguimos disfrutando desde el coche... De lo que vemos, nos encanta el paseo que conduce a faro junto al Santuario da Virxe da Barca, un lugar que sobrecoge, sobre todo visto con este abrupto clima... Intentamos bajar, pero volvemos al coche empapadas en menos cinco minutos, el viento y la lluvia son fantásticos aliados para dejarte chupida en pocos minutos... 

A pocos km paramos en el Faro Touriñan donde la lluvia nos dio una ligera tregua y disfrutamos de las hermosas vistas. 

 

Aunque se hacía ya tarde, decidimos avanzar un poco más hacia Fisterre y dormir en un lugar intermedio recomendado por la aplicación, en el extremo norte de la Playa de Rostro.

La llegada al lugar no nos produjo gran simpatía, pues debido a las fuertes lluvias estaba todo embarrado, pero como era tarde, decidimos quedarnos. Y gracias  a dios que lo hicimos!!, pues lo que vino después fue uno de los momentos más mágicos de nuestra vida... De repente, en medio de los grandes nubarrones que cubrían el cielo, comenzó a formarse una franja de cielo abierto justo en el horizonte, donde el sol se estaba escondiendo. Allí apareció el astro rey, tan deseado en el día de hoy, y nos ofreció uno de los anocheceres más hermosos. 

 

El horizonte con el radiante sol, la playa con niebla y la parte de la montaña coronada por un enorme y brillante arcoíris...   

A mí, ni que decir tiene que me saltaron las lágrimas... La naturaleza tiene estos increíbles contrastes que te permiten ver espectáculos de inigualable belleza.

Cenamos en la soldad del aparcamiento, arrulladas por el sonido de las olas del mar....